- Título: Blazer Drive
- Autor: Seishi Kishimoto
- Editorial: Kôdansha
- Revista: Shônen Rival
- Años publicación: 2008-?
- Clasificación: shônen
- Tomos: 1 (en curso)
Blazer Drive es la nueva serie de Seishi “el hermanísimo” Kishimoto, es decir, el hermano gemelo de Masashi Kishimoto, autor de Naruto. Después de terminar su anterior obra 666 Satan, Kishimoto se ha embarcado en la creación de este nuevo manga y videojuego (ha diseñado los personajes del videojuego de Sega del mismo título y a partir de ellos ha hecho este manga) en la novísima revista Shônen Rival de Kôdansha, que inició su andadura allá por abril de 2008.
El manga nos presenta un mundo en un futuro no muy lejano, en el que existen unas pegatinas (llamadas mysticker -supongo que es una contracción de mysterious sticker o mystic sticker, o sea “pegatina misteriosa” o “pegatina mística”) que sirven más o menos para cualquier cosa. Por ejemplo, si pegas una pegatina de electricidad en un electrodoméstico, ese electrodoméstico se pondrá en marcha; si pegas una de calor en la base de una tetera o una olla, el agua que haya dentro se pondrá a hervir, etcétera. Ni que decir tiene que estas pegatinas no son aptas para consumo humano: es decir, si te las pegas en la piel, lo más seguro es que te hagan un daño tremendo y termines en el hospital con quemaduras de tercer grado.
Sin embargo, dice la leyenda urbana que hay unos pocos individuos que tienen la facultad de no solo no ser afectados por la acción de las pegatinas si se las pegan en la piel, sino de poder aprovechar sus facultades. Estos individuos, de cuya existencia duda todo el mundo, son llamados “Blazer Drive”. Así, por ejemplo, si un Blazer Drive se pega una pegatina de calor, podrá lanzar bolas de fuego por las manos.
En fin, la historia nos cuenta las aventuras de Daichi, un chaval que al principio de la obra se hace pasar por Blazer Drive sin que sepa que realmente lo es. Hasta el momento, pensaba que los Blazer Drive no existían, pero las circunstancias hacen que se tope con uno, que se carga a su hermano (ojo, no son spoilers, todo esto ocurre en las primeras páginas). Antes de morir, su hermano le revela que él también es un Blazer Drive y que debe luchar contra los malos malosos: para ello, le da una pegatina de electricidad muy poco común (existen pegatinas comunes, y “raras”). En fin, el poder oculto de Daichi se despierta y tendrá que luchar contra los malos con la ayuda de Kuroki, un colega de su difunto hermano que se ofrece a enseñarle a usar el poder de las pegatinas.
Y así empieza toda una aventura con mucha acción, muchas luchas, y mucha búsqueda de pegatinas misteriosas, a cuál más potente y molongui. ¿Francamente? Me aburrí muchísimo leyendo este tomo. Es cierto que el dibujo está muy bien, Seishi ha evolucionado mucho su dibujo y ya no se parece tanto al de su hermano y es francamente atractivo, al nivel de los mejores dibujantes de shônen de la actualidad. Pero el rollo tan visto ya de las peleas y del “hazte con todos” me parece soporífero.
Todo el tema de las pegatinas, además, huele demasiado a operación de marketing, ya que si el manga y el videojuego se venden bien, obviamente todos los diseños de pegatinas que se han creado para ambas cosas se fabricarán en la realidad. Si la jugada les sale bien a Sega, Kôdansha y Kishimoto, pueden llegar a forrarse con las pegatinitas de marras. Esto no quita que sea un título muy atractivo por su dibujo moderno y dinámico, su temática trepidante y también el componente “tie up” con el videojuego. No sé si el videojuego llegará a Europa o no, pero el manga no me cabe duda de que acabará siendo publicado tarde o temprano por estos lares, porque tiene todos los números para venderse bastante bien aquí. Aunque, como he dicho antes, me ha aburrido al mismo nivel que me aburrió AirGear, que más o menos tiene un dibujo similiar y una temática y un desarrollo de la historia -en el que prima la acción por encima de todo- también muy parecidos.
Comentarios recientes