- Título: 瓶詰の地獄 –Binzume no jigoku– (Infierno embotellado)
- Autor: Suehiro Maruo
- Editorial: Enterbrain
- Revista: Comic Beam
- Años publicación: 2010-12
- Clasificación: historias cortas, ero-guro
- Tomos: 1
Suehiro Maruo fue uno de los mayores descubrimientos que nos regaló Joan Navarro, editor de Glénat y actual propietario de la reencarnación de la misma editorial, EDT, una auténtica sorpresa para lo que (me incluyo) no teníamos ni idea de las profundidades creativas a las que el manga japonés puede llegar.
Las extrañamente repulsivas pero a la vez atractivas imágenes de Maruo; esos diseños de personajes tan “inocentes” a los que se colocaba en situaciones tan grotescas e inimaginables; esa ambientación “años 20” de la mayoría de su obra, nos causaron asco pero a la vez fascinación. Lo he dicho muchas veces: no soy consumidor de productos gore ni nada parecido, de hecho me dan bastante igual las películas de terror de serie B de entrañas y violencia. Pero con autores como Maruo o Kago tengo que hacer excepciones, porque ellos no pintan las entrañas ni el sexo como tales, sino que las utilizan como medio o excusa para presentar historias a priori repulsivas, pero que pronto se revelan extrañamente fascinantes.
En los últimos años, Maruo viró un poco en la tónica general de su obra y adaptó a cómic La extraña historia de la isla Panorama (2008) y La oruga (2009), dos obras del maestro japonés de la novela de misterio Ranpo Edogawa. A mí, personalmente, La isla Panorama me tiene el corazón robado y fácilmente es mi historia de Maruo favorita. Así pues, con gran interés me decidí a leer el último libro (no artbook o reedición, se entiende, que ha habido unos cuantos de estos) de Suehiro Maruo: Binzume no jigoku (Infierno embotellado).
Empezando por la conclusión, puedo decir que Maruo vuelve un poco a sus orígenes con este libro, ya que de nuevo afloran las temáticas habituales suyas de misterio, sangre y sexo. Esta es una recopilación de 4 historias publicadas originalmente en la revista Comic Beam entre 2010 y 2012.
- Binzume no jigoku (Infierno embotellado, 2012), que además da título al libro, adapta una historia homónima del novelista Yumeno Kyūsaku, pionero de la novela de fantasía y surrealismo japonesa, que narra las desventuras de una pareja de hermanos que tienen que crecer juntos en una isla desierta tras un naufragio y piden ayuda a través de mensajes metidos en botellas de cerveza. Se trata de una historia onírica de narrativa más bien confusa, algo justificado por el propio Maruo en el epílogo, argumentando que “estas incongruencias argumentales, ¿forman parte de los míticos errores de Yumeno Kyūsaku o tal vez lo planeó así expresamente?”
- Sei Antoine no yūwaku (La tentación de San Antonio, 2010) es una extrañísima historia inspirada en el episodio místico de la tentación de San Antonio y que bebe directamente de obras pictóricas relacionadas con el hecho, como la de Dalí, el Bosco, Grünewald, Max Ernst, etcétera.
- Koganemochi (El mochi de oro, 2011-12), adaptación de una historia de rakugo (monólogos tradicionales japoneses) bastante inquietante sobre un masajista supuestamente ciego con unos vecinos que sospechan que tiene muchísimo dinero pero no tienen ni idea de dónde lo esconde.
- Kawaisō-na ane (La pobre hermana mayor, 2011), una historia “100% Maruo” protagonizada por una desdichada chica que acaba teniendo que irse de su casa para escapar de su tiránico padre y acaba prostituyéndose para sobrevivir y cuidar también de su hermanastro, un chaval nacido con malformaciones físicas y deficiencias mentales.
Lo mejor
- Vuelve el Maruo “de siempre”.
- Esas planchas, esas viñetas, esos detalles tan increíbles del Maruo de los últimos tiempos.
- Los guiños a obras de arte y la ambientación “años 20”.
Lo peor
- Altibajos en las historias, no todas mantienen el mismo listón de calidad.
- El argumento de la primera historia es bastante confuso, pero eso se puede achacar al original de Yumeno Kyūsaku.
- Personalmente me gustó mucho más La isla Panorama, pero entiendo que es una excepción dentro de la carrera de Maruo.
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