- Título: ジパング -Zipang-
- Autor: Kaiji Kawaguchi
- Editorial: Kôdansha
- Revista: Morning
- Años publicación: 2000-?
- Clasificación: seinen, bélico
- Tomos: 36 (en curso)
Tengo el blog muy abandonado este mes, que está siendo más caótico y ocupado de lo que había previsto. En fin, supongo que ya me resarciré en noviembre, de momento sigamos reseñando las obras más famosas de Kaiji Kawaguchi, uno de los autores invitados a este XIV Salón del Manga, un verdadero peso pesado del seinen.
Con Zipang, Kawaguchi quiso seguramente seguir la estela de su éxito más sonado hasta el momento, The Silent Service, y volvió a meterse de lleno en el tema bélico, esta vez con un argumento que muy novedoso no es, pero que es resultón y, si está bien llevado (como es el caso), puede convertir a un manga que en principio podría ser mediocre en un muy buen manga.
El argumento no es nada complicado de explicar, es tan sencillo como que el gobierno japonés manda a una pequeña flota de las Fuerzas de Autodefensa (FF.AA.) de Japón a una misión de mantenimiento de paz en Ecuador (un tema muy polémico ya que, en teoría, según estipula la Constitución, las FF. AA. solo pueden entrar en combate para defender a Japón de un posible ataque, con lo cual cualquier operación que incluya un potencial conflicto en el extranjero es vista con mucho recelo por el público japonés). La flota, entre la que se encuentra la fragata Mirai, un barco de guerra equipado con tecnología AEGIS último modelo, zarpa pues rumbo a Sudamérica ante la crítica mirada de los manifestantes que exigen que la operación se cancele.
En un momento dado, la flotilla se topa con una fuerte tormenta, un rayo impacta sobre el Mirai (el nombre significa “futuro”) y, sin comerlo ni beberlo, ¡se topan de bruces con el legendario Yamato, buque insignia de la Armada Imperial japonesa durante la II Guerra Mundial! Poco después, los tripulantes del Mirai descubren que se encuentran en una zona con muchísima concentración de barcos y aviones, que parecen pertenecer a dos bandos opuestos, y que están en plena batalla.
¡Por un desconocido fenómeno, el Mirai se ha trasladado a junio de 1942, en plena batalla de Midway entre la Armada Imperial japonesa y la flota de los Estados Unidos! La batalla de Midway fue importantísima en el devenir de la II Guerra Mundial porque marcó un antes y un después. Hasta ese momento, la maquinaria japonesa de guerra había pasado como una apisonadora imparable por ahí donde ponía la vista, pero en Midway los Estados Unidos consiguieron pararles los pies por primera vez. A partir de esa batalla, todo iría cuesta abajo: un camino descendente que desembocaría en el bombardeo intensísimo de Japón por parte de los Estados Unidos y en la terrible batalla de Okinawa, y que culminaría con las dos bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki.
Cuando la tripulación del Mirai aún está intentando asimilar lo ocurrido, encuentran un avión derribado, a punto de hundirse, con un superviviente a bordo, un joven oficial llamado Takumi Kusaka, teniente comandante de la Armada Imperial japonesa. Así pues, el primer dilema es: ¿salvan al joven oficial de una muerte segura o le dejan morir ahí mismo? Si le salvan, ¿cambiarán el curso de la Historia? ¿Deben inmiscuirse o no? Al final, después de una discusión a bordo, se decide salvar a Kusaka, que a partir de entonces se incorporará como personaje habitual en la historia.
El siguiente dilema, claro está, es: con un barco del siglo XXI equipado con la última tecnología bélica es posible acabar con cualquier acorazado e incluso portaaviones de los años 40… ¿Deben utilizar esta baza a su favor o bien deben mantenerse al margen? Si se mantienen al margen, ellos conocen perfectamente lo que ocurrió y saben que no intentar detener la ceguera japonesa a tiempo provocará millones de muertes de sus compatriotas…
Así empieza pues esta historia, que como ya he dicho antes es bastante manida (lo del viaje en el tiempo y las dudas sobre si inmiscuirse o no en la historia lo hemos visto/leído en infinidad de ocasiones), pero que resulta muy trepidante en manos de un maestro como Kawaguchi, que no se corta a la hora de incluir temática patriótica japonesa en su obra. Este es un terreno muy resbaladizo, ya que cualquier historia que hable de la II Guerra Mundial, según como se enfoque, puede llegar a ser considerada “de extrema derecha” por el público y por lo tanto perder inmediatamente el apoyo de los lectores e incluso ganarse su desprecio. Pero no, Kawaguchi consigue esquivar (a veces por los pelos) la temática más radical del “gran Japón” y realiza una historia muy bien hilvanada que no se emborracha (en demasía) en discursitos de exaltación de la raza japonesa.
Debido a su calidad y al apoyo del público y la crítica, Jipang consiguió un premio Kôdansha y además se ha adaptado a un anime de 26 episodios (que adapta solamente una parte del manga). El dibujo de Zipang es mucho más claro y estilizado que en The Silent Service, se nota una evolución muy positiva en el estilo de Kawaguchi que acerca el dibujo (sobre todo de los barcos y aviones, tanto modernos como antiguos) a cotas de belleza y realismo dignas de Naoki Urasawa.
En su momento yo me leí más o menos hasta el tomo 5 y la verdad es que la historia me encantó y siempre he querido seguir leyéndola. Kawaguchi la lleva muy bien y sabe cómo sorprender al lector y mantenerle en vilo. Igual cuando se termine me agencio un día la serie completa y me la ventilo toda seguida, ya veremos.
El caso es que ocho años después de su inicio sigue publicándose en las páginas de la revista Morning y lleva ya la friolera de 36 tomos… Como ya dije en la reseña de The Silent Service, Kawaguchi será muy bueno, pero sus historias más conocidas y exitosas son tan largas que francamente hay que tener narices para arriesgarse a traerlas a nuestro país. Los franceses, sin embargo, parecen más atrevidos en este sentido (también tienen un mercado del manga infinitamente mayor) y la editorial Kana ha publicado ya los 15 primeros tomos. En fin, ¿quién sabe? A ver si algún día podemos leerla en castellano, ¿no? ¡La esperanza es lo último que se pierde!
La verdad, por el argumento, me recuerda al “Final de la cuenta atrás” vista desde del lado japonés.
ellos conocen perfectamente lo que ocurrió y saben que no intentar detener la ceguera japonesa a tiempo provocará millones de muertes de sus compatriotas…
…Aunque en este caso sería peor el remedio que la enfermedad…
Pues sí, como dice Jesús, la idea parece un remake de “El final de la Cuenta atrás”. Además, por muy avanzada que sea la tecnología de una fragata AEGIS, poco podría hacer para frenar a los EEUU en la II Guerra Mundial. Por mucho radar y muchos misiles, al final la enviarían a pique a golpe de bombas como al Yamato. Lo único que podría cambiar la historia sería un navío con armas nucleares…y ya sabemos que Japón no tiene.
Muchas gracias por ambas reseñas. Tal y como ocurre con prácticamente todas las obras del propio Urasawa, es un tipo de manga que no me gusta (en este caso está el añadido de mi neura con las premisas revisionistas), pero que aun así, personalmente, merece la pena leer. A ver si en un futuro…
buenisimo, vi algunos capitulos de la serie y ya eran fascinantes, ni me lo imagino en papel
siempre tendra un hueco en la estanteria por si llega, pero creo que mas de 30 tomos y abierta es un factor que la condiciona para España 🙁
A mí también me ha recordado a el final de la cuenta atrás. Tiene muy buena pinta, pero creo que la está alargando demasiado. Luego quizá está tan bien llevada que no se nota, pero a priori me parecen excesivos tantos tomos para esa historia.
este manga es tremendo *_* llevo dos años queriendo que lo traigan *_* a ver si Eagle vende bien y se pueden animar con esta o que traigan otras de Kawaguchi que tampoco pasa nada 😀 😀 😀
Mis felicitaciones al autor de este blog. Lo leo con mucho interés y poco a poco voy aprendiendo algo sobre la cultura del manga. De momento conseguiré Eagle y a ver si hay suerte y se publican otros títulos de este y otros autores. Seguiré leyendo lo que publiques Marc. Animo! y saludos para los demás seguidores del blog
buscando sobre esta serie he leido tu comentario, he visto la serie animada y me encanto, soy un fan de la segunda guerra mundial y vi la pelicula “el final de la cuenta atras”, y aunque la premisa es la misma, un avion moderno en plena guerra del pacifico hay diferencias, entre ellas que el MIRAI si se mete en la historia, la modifica y crea paradojas, ademas de que destruye un portaaviones americano (el WASP)
aqui se comenta que no haria mucho y acabaria por ser hundido, puede, pero un barco con el aegis, radar moderno y misiles podria destruir sin despeinarse toda una taskforce americana, el enterprise, lexington, hornet… los americanos pierden todos los portaaviones en una mision como les paso a los japoneses en midway y nada podria detener ya a los japoneses. Midway fue el punto de inflexion por que los japoneses perdieron 4 portaaviones y los mejores pilotos de aviones, imagina que no los pierden y los pierden los americanos…
gracias por el post, estoy loco por conseguir el manga en español, me encantaria saber como acabo el mirai, la serie animada me dejo con ganas de mucho mas 🙂
saludos