- Nombre del museo: Museo de Arte Machiko Hasegawa
- Dirección: Sakura-Shinmachi 1-30-6 Setagaya, Tokio (Google Maps)
- Cómo ir: A 10 minutos a pie de la estación Sakura-Shinmachi (línea Den’en Toshi de Tōkyū)
- Precio: 600 yenes adultos / 500 estudiantes / 400 niños
- Horario: De 10.00 a 17.30. Cerrado los lunes no festivos y la época de fin e inicio de año
He tardado bastante, pero en conjunción con la “Semana Machiko Hasegawa” ha llegado la hora de seguir con la serie de artículos relacionados con museos o sitios relacionados con el manga en Japón. Pese a que siempre he centrado el peso del blog en las reseñas puras y duras, hasta ahora había estado escribiendo algunos artículos accesorios, como la serie Adivina qué mangaka es o los artículos de Opinión, amén de algunos artículos sobre paseos, ferias o algún que otro museo. Ahora aprovecho para ordenar un poco el blog y crear dos nuevas etiquetas, Museos y lugares y Festivales y ferias, que sustituyen a las etiquetas paseos y traveling.
- En Museos y lugares, pues, se agrupan visitas a museos relacionados con el manga, así como a lugares emblemáticos o históricos. Hasta ahora tenemos el Jackson Hole (de Nana), la nueva tienda de Mandarake en Akihabara, el Tour de editoriales de manga, la Makoto-chan House y los apartamentos Tokiwa-sō, el Museo Internacional del Manga de Kioto y el Museo de Shōtarō Ishinomori.
- En Festivales y ferias, una sección más reciente, agrupo las visitas a eventos relacionados con el manga, principalmente en Japón. Hasta ahora tengo la Jump Festa 2009, el Comiket 75 y Tokyo Anime Fair 2009.
Así pues, como ya sugerí en el artículo del Museo de Shōtarō Ishinomori, a partir de ahora pienso ir ampliando esta sección con otros museos o lugares que he ido visitando o que visitaré. Para empezar, un pequeño lugar bastante curioso, el Museo de arte Machiko Hasegawa.
Ya hablé bastante sobre este sitio y sobre Machiko Hasegawa en la reseña Sazae-san uchiakebanashi y en Adivina qué mangaka es (XIV), así que no me extenderé mucho sobre quién fue esta autora ni sobre su importancia en el mundo del manga. (Re)leed los dos posts para más información. Aunque no fue el primer museo dedicado a un autor de manga que abrió en Japón (ese honor lo tiene el Manga Kaikan dedicado a Rakuten Kitazawa, que abrió en 1966), he elegido este museo en particular para empezar la serie por la importancia de su autora y sus obras en el marco del manga contemporáneo. Aunque no es estrictamente un museo dedicado a la vida y obra de la autora, sino algo bastante peculiar…
El Museo de arte Machiko Hasegawa está situado al término de una calle comercial en el barrio de Sakura-Shinmachi llamada “calle Sazae-san”, muy cerca de donde Hasegawa vivió gran parte de su vida. La estación de tren más cercana es Sakura-Shinmachi, en la línea Tōkyū Den’en Toshi, a solo 9 minutos de Shibuya. Desde la estación se tarda menos de 10 minutos a pie en llegar al museo, un pequeño edificio de obra vista. El trayecto a pie es bastante entretenido debido a que la calle comercial que conduce al museo tiene bastantes detalles relacionados con la obra de Hasegawa, sobre todo Sazae-san e Ijiwaru baasan, desde banderolas en las farolas hasta azulejos en los pilones, pasando por escaparates decorados con motivos de los personajes.
¿Y qué podría esperar uno al entrar en un museo dedicado a la memoria de una famosísima dibujante de manga después de apoquinar los 600 yenes de la entrada? Pues exposiciones sobre sus obras, páginas originales, un recorrido por la vida de la autora, objetos personales suyos y cosas así, ¿verdad? Pues no, este museo es muy diferente, puesto que el museo está dedicado a la exposición y conservación de obras pictóricas y esculturas de estilos dispares… No realizados por la autora, sino por reputados pintores, sobre todo japoneses.
Cuenta la mismísima Hasegawa en el panfleto del museo, en forma de manga, que cuando a su hermana y a ella empezaron a irles muy bien las cosas, dieron rienda suelta a una de sus grandes aficiones: la compra de obras de arte (otra de sus aficiones era viajar). Así, se dedicaban a recorrer galerías de arte y exposiciones especiales en grandes almacenes en busca de pinturas que les gustaran. Su único criterio era este: que les gustara la obra.
Así, con el tiempo fueron obteniendo una considerable colección (bastante ecléctica, huelga decirlo). Un día, invitaron a su casa a otro coleccionista de cuadros, que las felicitó por la calidad de las obras que tenían pero que también les dijo que “lo triste de todo esto es que solo su familia puede disfrutar de ellas”. Al abrir los ojos ante la realidad, las dos hermanas Hasegawa decidieron que harían un museo en el que exponer al público todas sus obras para que no solo ellas, sino también todo el mundo con cierta inquietud artística, pudieran disfrutarlas. Así, el Museo de Arte Hasegawa abrió sus puertas en 1985 (en 1992, tras la muerte de Machiko aquel mismo año, su nombre cambió a Museo de Arte Machiko Hasegawa).
No sé si se abrió antes o después de la muerte de Machiko, pero la única referencia a las obras manga y a la propia Machiko como mangaka que hay en el museo es una pequeña sala anexa. En ella, pues lo típico y esperable en un lugar como este. A saber: cronología de la vida de la autora, curiosidades sobre sus aficiones, manera de ser, etcétera, páginas originales de algunas de sus obras, ediciones originales antiguas, una tele en la que se pasan episodios memorables de Sazae-san relacionados con la época del año en la que se visite el museo y cosas así. También en este caso había una maqueta de la casa de la familia de Sazae.
Pero no os voy a engañar: la visita decepciona bastante. El museo tiene obras de arte bastante bonitas y si os interesa el arte pictórico, entonces puede ser una buena visita, pero si pensáis en visitar el museo exclusivamente para conocer mejor la obra manga de Machiko Hasegawa, os llevaréis una decepción. La sala dedicada al manga es pequeña y decorada con poca gracia en comparación con el resto del edificio y francamente parece un añadido hecho a regañadientes por “presión popular”. Imagino que las Hasegawa no querían que se relacionara su museo con el manga, sino que querían que fuera considerado un museo de arte puro y duro, Pero los visitantes querían más y querían ver páginas originales de Sazae-san y objetos conmemorativos. Bueno, es la sensación que da, no sé si fue así realmente o no.
Finalmente, destacar la tienda del museo, en la que, aquí sí, se pueden adquirir libros y objetos relacionados con las obras manga de Hasegawa. Algunos de los objetos solo se pueden adquirir en el museo, lo que aumenta su “cotización” entre los fans de Sazae-san e Ijiwaru baasan, unos fans que básicamente andan entre los 50 y los 70 años de edad.
¿Qué os ha parecido esta primera visita? Para el segundo artículo de la serie (sin contar los que ya había escrito antes) os puedo dar a elegir. Tengo “comentables” hasta ahora el Museo de Rakuten Kitazawa (el decano de todos los museos de manga), el Museo Osamu Tezuka, el pueblo de Gōshō Aoyama (autor de Detective Conan y Yaiba) tal como estaba en 2003 –me consta que ahora ha cambiado-, el pueblo de Sakai-Minato y el Museo Shigeru Mizuki, la Kitarō Jaya también de Shigeru Mizuki, el Museo de Animación de Suginami, el Museo de Fujio Akatsuka, el Museo Bandai / Museo Gundam antes de que cerrara (¡con lo chulo que era!), el Museo Ghibli (of course, casi me lo dejo), la Sala Memorial Suihō Tagawa (autor de Norakuro) y el templo (budista) del manga en Kawasaki. En todos estos sitios he estado. Y me faltan varios aún, pero normalmente quedan muy en provincias y es complicado que pueda visitarlos.
En fin, ¿cuál comento en el segundo artículo?
Uf, todos parecen la mar de interesantes, quién los pisara (¡Qué envidia, Marc!).
A mí me llama el Rakuten Kitazawa, por eso de que dices que es el decano de todos los museos de manga… y a mí ni me sonaba el nombre ^^u
Jo, me has dejado chafado. Una pena que no haya más cosa de Hasegawa dibujante, aunque esa tienda de recuerdos del museo me llama la atención… XP
Para próximos artículos, mis preferencias pasan por Aoyama, Akatsuka, Mizuki y Tezuka, en ese orden (es que del Museo Tezuka hice un reportaje de cuatro páginas hace muchos años para una revista de la universidad, y claro… lo tengo algo “visto”).
PD: técnicamente, Rakuten Kitazawa fue el primer autor de manga en ver su obra “publicada” en España (una página de “Tonda Haneko jô” en la revista infantil catalana Cavall Fort, 1969)